Con una espectacular sumisión en el tercer round, Merab Dvalishvili derrotó a Sean O’Malley para retener el título de las 135 libras en UFC 316.
Pese a tener un arranque flojo y dejar crecer por momentos a O’Malley en el tercer round, el peleador georgiano nuevamente hizo gala de su increíble cardio y sometió al mismo rival al que un año atrás ya había derrotar en la Esfera de Las Vegas durante la Noche Mexicana de la UFC.
Ya para el segundo asalto, el peleador georgiano se convirtió en una verdadera pesadilla para O’Malley, quien simplemente no le pudo seguir el ritmo cuando Dvalishvili empezó a utilizar su imponente lucha.
Pronto, y poco a poco, el campeón fue reduciendo poco a poco a su rival, con potentes derribos desde todas las zonas, pero siempre cuidándose de la durísima pegada de ‘Suga’.
Con el segundo asalto muy dominado, y O’Malley visiblemente cansado, Dvalishvili salió a devorarse al retado y a buscar la finalización, esa que siempre le han cuestionado y que muchos consideran que le faltaba para meterse dentro de la elite de la UFC.
Pero Dvalishvili cumplió y en el tercer round otra vez impuso su lucha sobre O’Malley hasta encontrarle una guillotina cuando los dos estaban a ras de piso. El retador intentó zafarse con un giro, pero Dvalishvili no lo dejó escapar y ‘Suga’ terminó rindiéndose.
‘ESTOY EN LA CIMA DEL MUNDO’
Tras su triunfo, Dvalishvili salió del octágono para saludar a Donald Trump, espectador de lujo y en primera fila.
“Que gran momento para hacer esto frente al presidente Trump. Primero que nada, Dana White muchas gracias por crear esta hermosa compañía, darme la mejor oportunidad del mundo, ahora mismo estoy en la cima del mundo, soy campeón del mundo.
“Antes no tenía nada, estoy muy agradecido. Sólo quiero inspirar a muchas generaciones de jóvenes, mostrarles mi ejemplo. No importa dónde estés, mientras sepas a dónde vas y tengas el corazón. Crean en sus sueños y síganlos. Todo es posible, si yo lo hice, ustedes también”, sentenció.