Dos años después de que un positivo por marihuana la privara de disputar sus primeros Juegos Olímpicos, Sha’Carri Richardson se convirtió en la nueva campeona del mundo de los 100 metros planos con récord incluido.
La atleta de 23 años de edad corrió por el carril número nueve, el extremo más lejano de la pista, y cronometró 10.65 segundos para igualar el mejor registro del año y fijar una nueva marca para el Campeonato Mundial, que este año se disputa en Budapest.
La surgida de LSU, superó a dos favoritas en la Final, las jamaicanas Shericka Jackson, por siete centésimas, y Shelly-Ann Fraser-Pryce —cinco veces campeona del mundo—, por 12 centésimas.
“Aquí me tienen, se los dije. No he vuelto, soy mejor”, aseguró todavía sobre la pista del Centro Nacional de Atletismo en Budapest.
Pese a que llegó a Hungría como la campeona nacional de Estados Unidos y ya había vencido a Jackson, Sha’Carri Richardson no figuraba entre las favoritas para llevarse la medalla de oro en su primera gran competición internacional.
EL POSITIVO POR MARIHUANA QUE DEJÓ A SHA’CARRI RICHARDSON FUERA DE TOKIO 2020
El de Richardson es un sensacional retorno a los primeros planos, justo a tiempo para los Juegos Olímpicos de París 2024 que se escenificarán en menos de 12 meses.
Richardson se perfilaba para ser la nueva estrella de la velocidad en los Estados Unidos al arrasar en el clasificatorio olímpico hace dos años, pero esa victoria fue anulada tras dar positivo por marihuana, una infracción de dopaje que reconoció de inmediato al explicar que estaba triste por el reciente deceso de su madre.
“Les diría que nunca se rindan. Nunca permitan que los medios, gente desconocida ni nadie, salvo tú, definan lo que eres. Les diría ‘siempre sal a pelear, sin importar lo que sea, pelea’ ”, respondió a un pregunta sobre el significado de su victoria.
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