Sebastian Rode tuvo que jugar con un vendaje en la cabeza desde el minuto 8 ante Rangers dentro de la Final de la UEFA Europa League.
Y es que cuando corría el minuto 4, el jugador del Eintracht Frankfurt recibió una dura entrada por parte de John Lundstram, quien levantó de más la pierna, y le pegó con los tachones.
A pesar de sufrir una aparatosa herida, el árbitro esloveno, Slavko Vincic, sólo sancionó la falta y no le mostró ni la amarilla. Aunado a eso, no fue requerido para revisar la jugada en el VAR.
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Tras ver la sangre en Sebastian Rode, los jugadores y la banca del Eintracht Frankfurt saltaron para protestas un castigo mayor al futbolista del Rangers; sin embargo, el silbante no se inmutó y dejó seguir las acciones del partido.
El mediocampista alemán estuvo tirado alrededor de tres minutos en la cancha del Estadio Ramón Sánchez Pizjuán, donde recibió un vendaje en la cabeza, y así siguió jugando.
Eso sí, el germano de 31 años tuvo que cambiarse la camiseta del Eintracht Frankfurt por las manchas que habían de sangre en su indumentaria.
