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Hernán Cristante: antes de tomar Toluca sabía que no tenía que ir

Hernán Cristante

El entrenador del Querétaro también reveló que la directiva emplumada tiene su renuncia para cuando termine el Clausura 2022, pero solo por si es necesario para no entorpecer la reestructura.

Con futuro incierto pero plenamente satisfecho por lo que ha hecho en sus últimos equipos, Hernán Cristante delineó los sentimientos encontrados que hoy son lo suyo: feliz por la evolución que ha visto en sus Gallos Blancos, pero también convencido de que podría ser su último torneo en la institución.

Aunque apenas lleva un torneo en dicho equipo, la inminente venta del equipo hizo que desde hace varias semanas la directiva recibiera su renuncia. Este episodio le cortaría nuevamente la continuidad, luego de que dirigió al Toluca solo por los dos torneos del 2021, aunque sabe que no debió aceptar esa oferta.

“De ese Toluca que me dijeron a qué jugaba, hoy ves a un Querétaro que no sabíamos a qué jugaba pero ahora sabemos a qué juega y eso me encanta. Lo supe antes de tomar Toluca, que no tenía que ir, pero el amor es más fuerte”, reveló en entrevista para Fox Sports Radio.

Ex portero de los Diablos Rojos, el argentino no mencionó nombres pero sí dio a entender que no todos en la directiva escarlata estuvieron de acuerdo con su diagnóstico del plantel, cuando ya se avecinaba el Clausura 2022, para el que fue destituido.

“Quería obviamente terminar mi contrato y la planeación de este torneo estaba muy clarita, no para algunos, entonces esa es la realidad. Resulta que para algunos las vicisitudes, las circunstancias, pesan, para otros no, pero también lo entiendo”, relató.

“La exigencia que yo tenía en Toluca era diferente, creo que ninguno de ahí tenía tanto deseo como yo de buscar y construir un equipo campeón, no creo. Y lo mejor que me pudo pasar es salir, tomar al equipo más conflictuado, más desprolijo hoy en día en lo que se ve y demás, para poder reconstruir”.

‘¿Para que voy a entorpecer lo que ya está conflictuado?’

Aunque en el Querétaro está lejos aún de zona de Liguilla, en la posición 16 de la Tabla, aseguró que su plantel ha evolucionado en lo futbolístico. No obstante, la directiva tiene ya la renuncia del DT en la mesa, sobre todo porque es consciente que el equipo tendrá que reestructurarse.

Tras los desmanes en el Estadio Corregidora del 5 de marzo, los Gallos recibieron un año de veto para jugar a puerta cerrada durante un año como local, además de que la Federación Mexicana de Futbol obligó a Grupo Caliente a vender el club, el cual era gestionado por Gabriel Solares como Presidente, quien también fue inhabilitado por la FMF.

“Les dije que dadas las circunstancias y viendo que hay que reestructurar el proyecto, ellos tienen mi renuncia terminando este torneo, no quiere decir que me baje del barco porque tengo un año más de contrato, pero por lo que pueda pasar”, explicó.

“¿Para qué voy a seguir entorpeciendo lo que hoy está muy conflictuado, esa es mi realidad, los chicos también lo saben, pero tampoco dejo de pensar que hay que preparar al equipo para el año que viene, pero hoy la realidad es abstraer a los chicos sobre el mañana y atender lo que estamos haciendo hoy, y lo han hecho bien, lo han valorado”.

El trauma por la violencia del Corregidora aún no está superado

Además dijo que para el equipo será muy difícil superar el trauma por lo acontecido en el partido contra el Atlas, si bien en lo personal él se siente tranquilo por las personas a las que pudo ayudar ese día, luego de que hubo quienes criticaron que incitó a los barristas a pelearse, por unas palabras que le fueron sacadas de contexto.

“Uno hizo lo que pudo para poder ayudar a gente, me quedo muy tranquilo porque me han escrito los involucrados, me quedo muy en paz, sé quién soy, sé lo que hago y sé lo que hice; por mi cuenta está superado, pero no lo puedes superar hasta que no vuelvas a ver a la gente de Querétaro en la tribuna”, añadió.

“Es muy feo jugar en tu cancha sabiendo que golpearon a la familia de Querétaro a través de individuos que no pueden pisar más ninguna cancha, no la de Querétaro nada más. Hoy la familia futbolística está lastimada por esto”.