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Atlanta United tiene nuevo técnico de talla mundial

Atlanta United tiene nuevo técnico de talla mundial

"Nuevo capítulo. Misma misión", de esa manera el Atlanta United confirmó a su próximo técnico.

Tras confirmarse la salida de Gerardo Martino, las miradas estaban en los campeones de la MLS para saber quién llegaría al banquillo, donde se llegaron a mencionar varios nombres, entre ellos: Marcelo Gallardo y Guillermo Barros Schelotto.

Sin embargo, ya salió 'humo blanco' en el equipo de Georgia; donde el elegido fue: Frank de Boer.

El neerlandés fue designado como el segundo técnico en la historia del Atlanta United, franquicia que conquistó su primer título de MLS en apenas su segunda temporada de existencia.

"Se ha distinguido por tener una gran preparación, tanto como entrenador como jugador; y estamos encantados de darle la bienvenida al club", resaltó el presidente Daren Eales.

El directivo norteamericano resaltó por qué se inclinaron por el holandés de 48 años: "Cuando comenzamos la búsqueda, estábamos decididos a encontrar a alguien que cumpliera con todos nuestros criterios. Además de cumplir con los valores fundamentales del club, la filosofía de Frank de cómo jugar de manera inequívoca se alinean con los nuestros", agregó.

Para finalizar, uno de los puntos primordiales fue el idioma, por lo que no tendrá problemas para comunicarse con un vestidor que está plagado de hispanoparlantes, y que su última contratación será Gonzalo 'Pity' Martínez.

"Tiene la capacidad multilingüe, incluyendo español e inglés, por lo que estamos seguros que será una transición sin problemas para el liderazgo de nuestro club".

El ex jugador que briló con el Barcelona, tiene experiencia al más alto nivel con Ajax, donde estuvo de 2010 a 2016 y conquistó cuatro títulos de Eredivisie.

Tras su salida del equipo de Ámsterdam emigró al Inter de Milán; sin embargo, los resultados no estuvieron de su lado para que la siguiente temporada saltara al Crystal Palace.

Ya en la Premier League, Frank de Boer sólo estuvo 77 en el banquillo, tras perder los primeros cuatro partidos y sin haber marcado un gol.