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América gritó en la ida de Cuartos de Final y prolongó su hegemonía sobre Cruz Azul

América gritó en la ida de Cuartos de Final y prolongó su hegemonía sobre Cruz Azul

América y Cruz Azul se volvieron a encontrar en una Liguilla casi cinco meses después de que las Águilas les arrebataran otro título de liga a los Celestes. Sin embargo, una vez más los de Coapa salieron victoriosos en la ida de los Cuartos de Final y alargaron su racha de partidos sin perder ante los Cementeros.

Los de Pedro Caixinha arrancaron intensos, tocando la puerta de Agustín Marchesín, quien apenas en los primeros minutos del partido tuvo que salir al rescate de los Azulcremas, aprovechndo un mal contro de Orbelín Pineda, quien no pudo aprovechar el haber quedado completamente solo ante el guardameta argentino.

En ese momento el encuentro vivió su primer momento determinante. El mediocampista guerrerense no se logró recuperar del choque ante el portero americanista y tuvo que ser sustituido apenas a los nueve minutos de juego, dejando su lugar a Jonathan Rodríguez.

Pese a la lesión de Pineda, Cruz Azul fue el primero en dar un golpe sobre la mesa. No se había cumplido el primer cuarto de hora cuando Jorge Sánchez contactó el esférico con la mano dentro de su propia área, provocando que Jorge Isaac Rojas señalara hacia el punto penal.

Milton Caraglio sería el encargado de ejecutar desde los once pasos, algo que hizo a la perfección, engañando a Agustín Marchesín y poniendo en ventaja a la Máquina.

Pero fue justo tras la anotación celeste que la ausencia de Orbelín comenzó a tomar importancia. Los Cementeros comenzaron a lucir desequilibrados y de a poco los de Miguel Herrera comenzaron a imponer sus condiciones sobre el terreno de juego.

Fue al 22' cuando la debacle comenzó a tomar forma. Un tiro de esquina cobrado por Renato Ibarra en el que Bruno Valdez superó a toda la zaga cruzazulina para rematar de cabeza, con tal suerte que el esférico pegó en Igor Lichnovsky para dejar sin podibilidades de reacción a Jesús Corona, concretando la igualada momentánea.

El tanto en propia puerta del chileno no hizo sino despertar los "fantasmas" de la Máquina, recordando aquel trágico autogol de Alejandro Castro en la Final del Clausura 2013.

Las Águilas siguieron sumando en confianza y de a poco se volvieron amos y señores del encuentro, logrando ponerse en ventaja antes de la finalización del primer tiempo.

Sobre el silbatazo que mandaría al descanso, Roger Martínez soltó un zapatazo de zurda al ángulo inferior derecho de Corona, quien pese a su estirada no pudo hacer nada para evitar el segundo de los locales.

La parte complementaria no hizo mas que confirmar la superioridad del América, que cada vez que se lo propuso generó peligro sobre la portería cementera, al tiempo que Pedro Caixinha no daba señales de reacción a nivel táctco.

Primero fue Ibargüen, quien a 54' mandó su remate de cabeza al poste izquierdo de Corona, comno avisando lo que estaba por venir.

A 16 minutos del final, la insistencia de las Águilas cobró su recompensa, una vez más por la vía de Roger Martínez, quien aprvechó una gran asistencia del propio Andrés Ibargüen para marcar su segundo tanto del encuentro.

Cruz Azul parecía no saberlo que pasaba y en los momentos finales del encuentro incluso se salvó de recibir un cuarto tanto que, a estas alturas, hubiera sido definitorio en la serie.

Con este marcador, la Máquina necesita vencer el próximo domingo al América por al menos dos goles, pero sin recibir más de uno, ya que en caso contrario los tantos de visita que consigan los de Miguel Herrera se convertirán en un facor definitivo para un posible criterio de desempate.