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Cada que comienza un nuevo certamen de la Liga MX, gran parte de las esperanzas se centran en que los equipos 'grandes' consigan revalidar esa etiqueta y peleen por el título, algo que hace varios torneo que no ocurre.
En este Clausura 2020, las expectativas estaban a la orden del día gracias a la inversión que Chivas realizó, a que el proyecto Siboldi en Cruz Azul arrancaría de cero y a que América llega con la obligación de alzarse con el título que dejó escapar en el Apertura 2019; sin embargo, en menos de 24 horas, las ilusiones de estas parcialidades parecen comenzar a derumbarse y a continuación te explicamos por qué:
CHIVAS
Lo del Guadalajara es, quizás, el caso más patente de un fracaso prematuro. Y es que si bien el principal objetivo del Rebaño en el Clausura 2020 es clasificarse a la Liguilla y pelear por el título liguero, lo cierto es que caer en octavos de final de Copa MX, ante un equipo del Ascenso MX, luego de la inversión hecha en refuerzos, resulta un tropiezo importante en el proyecto de las 'Chivalácticas', que por antonomasia deben aspirar a todo lo que jueguen.
AMÉRICA
En Coapa los resultados recientes pueden considerarse como buenos, con dos finales de liga en un año, un título de Copa MX y otro másde Campeón de Campeones, pero la exigencia de este club sempre encontrará áreas de mejora y la llegada de refuerzos de peso parece ser una de ellas. En las Águilas llevan buscando un hombre de gol que cargue con la cuota ofensiva desde hace un par de años y no lo han conseguido. De hecho, ha ocurrido todo lo contrario y la noticia de una nueva lesión de 'Nico' Castillo, quien llegó como contratación 'bomba' hace un año, ha sido uno de los fracasos más grandes en los últimos años para los azulcremas, que han tenido que recargar el peso de sus goles en hombres de menor cartel como Henry Martín o Federico Viñas.
CRUZ AZUL
La Máquina es probablemente el caso más agudo entre los llamados 'grandes', si de fracasos hablamos. Los Cementeros ya acumulan algunos torneos sin clasificarse siquiera a la Liguilla y desde su último título liguero han pasado más de 100 futbolistas extranjeros, de los cuales muy pocos han dejado huella. Esta mala práctica dentro del entorno celeste parece no terminar y el mejor ejemplo fue lo ocurrido con Paulinho Bóia, quien llegó a la Ciudad de México, ante la sorpresa de propios y extraños, ostentando una carrera cuando mucho intrascendente, para firmar como nuevo jugador de Cruz Azul. Sin embargo, el brasileño no duró ni un día en el país cuando desde La Noria surgió un comunicado que basicamente señalaba que el carioca no había superado las pruebas médicas, por lo que retiraban su oferta por el jugador.