En 2025, Red Bull Racing puso fin a la era de Christian Horner, quien durante dos décadas fue el jefe de equipo y figura clave en los éxitos de la escudería. La decisión se tomó antes del parón veraniego de julio, en medio de resultados decepcionantes y un ambiente cargado de tensiones internas.
La salida del británico no fue un movimiento sencillo. Oliver Mintzlaff, CEO of Corporate Projects and New Investments de Red Bull, reconoció que “no fue una decisión fácil”, aunque subrayó que el equipo necesitaba un cambio para recuperar el enfoque perdido.
Mintzlaff y cómo se gestó el adiós de Horner: ‘no se puede vivir de la historia’
El directivo defendió la trayectoria de Horner, pero dejó claro que el pasado no podía ser la única base para sostener el presente: “Christian tiene una trayectoria fantástica y ha logrado muchísimos éxitos, pero no se puede seguir apoyándose en la historia. Había llegado el momento de pasar página y comenzar un nuevo capítulo”, declaró a De Telegraaf.
Mintzlaff insistió en que la decisión no se tomó a la ligera y que se trató de un paso necesario dentro de una organización profesional que busca mantenerse competitiva.
Mintzlaff desaprueba críticas de Helmut Marko
La polémica se intensificó con las declaraciones de Helmut Marko, asesor histórico de Red Bull, quien dejó su cargo a finales de 2025. Marko aseguró que los últimos años con Horner “no fueron agradables”, acusándolo de “jugar sucio” y de “mentir sobre todo tipo de cosas”.
Mintzlaff respondió con firmeza: “no estoy de acuerdo con esas declaraciones”; además, añadió que quizá Marko también cambió con el paso del tiempo. Recordó que Horner y Marko trabajaron juntos de manera exitosa desde 2005, logrando más de veinte años de colaboración única en el deporte.
El CEO de Red Bull también destacó que pocas organizaciones deportivas mantienen la misma dirección durante tanto tiempo. Para él, la salida de Horner y la marcha de Marko no deben interpretarse como un fracaso, sino como parte de un proceso natural de renovación: “a veces simplemente necesitas una renovación para agitar las cosas”, afirmó.
Laurent Mekies tomó el mando de Red Bull
El relevo llegó con Laurent Mekies, promovido desde Racing Bulls, quien asumió la dirección del equipo. Desde su llegada, el rendimiento mostró una clara mejoría y la estructura parece haber encontrado estabilidad. Mintzlaff explicó que era evidente que había que actuar tras una primera mitad de temporada decepcionante, marcada por distracciones y problemas internos.
Es más, reconoció que era un “secreto a voces” que había demasiadas distracciones alrededor del equipo. Con Mekies al frente, la estructura recuperó concentración y los resultados lo reflejan.
“En los últimos meses hemos visto que el rendimiento mejora cuando todo el mundo está concentrado al cien por cien”, señaló.
Incluso, sin contar con el mejor coche, Max Verstappen estuvo cerca de conquistar el campeonato y ganó la mayoría de las carreras de la temporada, lo que confirmó que el cambio de liderazgo trajo un aire renovado.
La salida de Christian Horner marcó el cierre de una etapa histórica en Red Bull Racing. Oliver Mintzlaff defendió que el equipo necesitaba un nuevo rumbo y rechazó las frases de Helmut Marko. Con Laurent Mekies al mando, la escudería parece haber encontrado el enfoque que le permitirá seguir siendo protagonista en la Fórmula 1; sobre todo, con un 2026 ya con el nuevo reglamento técnico en la parrilla.