Cuando Diego Barbosa estaba listo para colgar los botines con apenas 23 años de edad, la mano de ‘D10s’ le salvó la carrera.
Diego Armando Maradona dejó una larga lista de recuerdos en su paso como entrenador por el futbol mexicano, pero quizá, su legado más grande descansa en el canterano del Atlas, quien antes de conocerle estaba aceptando que quizá su futuro estaba en una fábrica de pantalones y no en la cancha.
Pero para tocar el cielo con las manos, cuatro veces, Barbosa tuvo que aprender a sufrir y sacrificar. Nacido en septiembre de 1996, el padre de Diego ganó el privilegio de nombrar a su hijo ‘Diego Armando’, como en honor a la leyenda del futbol argentino.
Diego habitaba en la colonia Atlas, Jalisco, él arrancó sus Fuerzas Básicas en Atlas Paradero, luego entró finalmente de lleno al Atlas, el club de los amores de toda su familia.
El lateral siguió su proceso con Atlas de forma natural, de 2015 a 2019, pero luego el conjunto rojinegro lo cedió a Venados de Yucatán en 2016, equipo que lo debutó en Liga Expansión.
Al terminar ese préstamo y tuvo que volver a los rojinegros, las oportunidades de jugar en Primera División no llegaban para Barbosa. En 2018, el lateral ya no veía claro su futuro en el futbol, por lo que alternó sus días como futbolista con un trabajo de medio tiempo en una fábrica de pantalones.
Cuando la posibilidad de retirarse ya era real y latente, Barbosa recibió una llamada, era Dorados de Sinaloa dispuesto a sumarlo al proyecto que entonces comandaba Paco Ramírez para el Apertura 2018 en Liga de Expansión. El DT sería cesado tras caer ante Atlante en la Jornada 7, con Barbosa todavía intentando ganarse su lugar.
El club dio la sorpresa del año en todo el futbol mexicano al contratar a Diego Armando Maradona como sustituto de Paco Ramírez, una noticia que cimbró a todos y que le cambió la carrera a Barbosa.
‘MARADONA ME DIJO QUE AGRADECIERA TODOS LOS DÍAS POR SER FUTBOLISTA’
A Barbosa le costó, pero terminó convenciendo a Maradona para hacerse de un puesto titular en un semestre que terminó siendo de ensueño para Dorados, el DT argentino y el canterano del Atlas.
“Un tiempo estuve trabajando en una fábrica de pantalones pensando en lo que venía. Aquel tiempo sí fue algo difícil, y cuando volví a retomar dije: ‘es la última vez que le voy a pegar si pega bueno, si no me pongo a estudiar’. Estuve semana y media en la fábrica y me hablaron de Dorados para preguntarme si me interesaba el proyecto. Acepté porque era un buen trampolín para regresar.
“Cuando llegó Maradona no jugaba tanto, en los entrenamientos pedía que disfrutáramos y yo lo escuchaba. Siempre traté de dar lo mejor y estuve listo para mi oportunidad, y Diego me dio la confianza. Se me acercó mucho para decirme que tenía mucho potencial y que agradeciera todos los días por ser futbolista. Se me quedó eso y ahora todos los días disfruto”, dijo a Mediotiempo.
Aquellos Dorados llegarían a la Final del Apertura 2018 en la Liga de Expansión, donde sólo pudieron ser detenidos por el despiadado Atlético San Luis que comandaba Nico Ibáñez.
Tras ese año cedido, Atlas volvió a tocar la puerta de Barbosa, ahora sí, para darle la oportunidad que se había ganado por su trabajo en Expansión.
‘AHORA SÍ CÓBRALES, CABRÓN’
“Estuvo a préstamo con Dorados y Atlas se interesa en regresarlo. Entonces, Maradona le dijo a Diego: ‘Ahora sí cabrón., cóbrales como jugador grande, desquítate todo lo que no te hayan pagado’, con la experiencia que tenía el Pelusa, lo orientó de esa forma”, dijo Omar Barbosa, hermano de Diego, a ESPN.
El idilio de Diego, en Primera División, con el equipo de sus amores duraría cinco torneos, dos años y medios en el que además los rojinegros lograron un histórico bicampeonato que puso fin a una sequía de 70 años sin un título de Liga.
2023 marcó el cierre del ciclo para Barbosa en el club que lo hizo sufrir, crecer y que lo llevó a la gloria. Tijuana se hizo del fichaje del lateral, pero lo tuvo apenas un año antes de que Antonio Mohamed lo pidiera para el infierno de Toluca.
A sus 29 años, Barbosa llegó a Toluca como un futbolista consagrado, valioso para Mohamed, importante para que los Diablos Rojos cosecharan cuatro títulos, entre ellos un bicampeonato de Liga.
Hoy, el futbol mexicano puede presumir a Aldo Rocha, Julián Quiñones y Diego Barbosa como sus únicos dos veces bicampeones, el último de ellos también con la bendición de ‘D10s’.