Greg Biffle, expiloto y leyenda de la NASCAR, muere en accidente aéreo junto a su familia

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Greg Biffle, leyenda de la NASCAR, falleció junto a su esposa e hijos en un accidente aéreo en Carolina del Norte.

El piloto Greg Biffle, nominado al Salón de la Fama de NASCAR, falleció en un accidente aéreo en Carolina del Norte junto a su esposa, hijos y amigos cercanos.

El mundo del automovilismo se encuentra de luto tras confirmarse la muerte de Greg Biffle (1969-2025), uno de los pilotos más destacados en la historia de la NASCAR. El deportista, reconocido por la organización como uno de los 75 mejores de todos los tiempos, perdió la vida en un accidente aéreo ocurrido en el aeropuerto de Statesville de Charlotte, Carolina del Norte.

Las autoridades informaron que Biffle viajaba en un pequeño jet junto a su esposa Cristina, sus hijos Emma y Ryder, además de tres acompañantes identificados como Dennis Dutton, su hijo Jack, y Craig Wadsworth. En total, siete personas fallecieron en el siniestro.


¿Quién fue Greg Biffle? Leyenda de la NASCAR

Nacido en Vancouver, Washington, Biffle compitió en más de 800 carreras en las tres series nacionales de NASCAR. Fue el primer piloto en conquistar títulos tanto en la Truck Series (2000) como en la Serie Xfinity (2002), acumulando un total de 54 victorias, incluidas 19 en la Serie de la Copa.

Su mejor temporada llegó en 2005, cuando finalizó segundo en la clasificación detrás de Tony Stewart. Tres años más tarde, se convirtió en el primer piloto en ganar dos carreras de playoffs en un mismo año. Durante casi toda su trayectoria corrió para Roush Fenway Racing, equipo con el que consolidó su carrera.


Aunque se retiró parcialmente en 2016, regresó en 2022 para disputar cinco competencias, incluida la prestigiosa Daytona 500.

A pesar de sus logros deportivos, Biffle también será recordado por su labor altruista. En 2024, tras el paso del Huracán Helene, se ofreció como piloto de helicóptero para suministrar ayuda a las comunidades afectadas. Su compromiso social fue reconocido por autoridades locales y por la propia NASCAR, que destacó su valentía y compasión.


En sus últimos años, Biffle se dedicó a fabricar autos en su taller, administrar una cantera en Virginia y compartir tiempo con sus hijos. Apenas días antes del accidente, publicó un video junto a su familia eligiendo un árbol de Navidad, reflejando la cercanía y alegría que caracterizaba sus momentos personales.

La noticia generó una ola de mensajes de condolencias en el mundo del automovilismo. Jack Roush, propietario de Roush Fenway Racing, expresó: “he perdido a un querido amigo y socio en nuestro programa de NASCAR. Sus contribuciones a nuestro equipo de carreras a lo largo de los años son inconmensurables”.

El gobernador de Carolina del Norte, Josh Stein, también reconoció su legado, destacando su valentía y compasión al ayudar a las víctimas del huracán. Por su parte, NASCAR emitió un comunicado en el que subrayó que Biffle fue más que un campeón: “Greg fue un miembro querido de la comunidad, un feroz competidor y un amigo para muchos. Su incansable trabajo salvó vidas”.

El comunicado oficial de las familias afectadas describió a Greg y Cristina como padres devotos y filántropos activos, cuya vida giraba en torno a sus hijos. Emma, de catorce años, fue recordada como una joven con un alma amable; mientras, Ryder, de cinco años, como un niño alegre y curioso.

La pérdida de los acompañantes Dennis Dutton, Jack y Craig Wadsworth también fue lamentada por la comunidad NASCAR, que los consideraba parte de su círculo cercano.

La muerte de Greg Biffle y su familia deja un vacío profundo en el automovilismo y en la comunidad que lo admiraba. Descansen en paz.