El Bayer Leverkusen dio la campanada en el Etihad Stadium al imponerse 0-2 en su visita histórica al Manchester City. Esta era la primera vez que ambos equipos se enfrentaban y el escenario parecía inmejorable para los ingleses, pues llegaban en cuarto lugar como amplios favoritos, sin conocer la derrota en las primeras cuatro jornadas.
La realidad del Leverkusen era muy diferente, estaba situado en la parte baja de la tabla. Con apenas una victoria, el conjunto de las Aspirinas estaba obligado a sumar, ¡y vaya que lo hizo! Resistieron, se impusieron en los momentos justos y lograron un triunfo vital.
El City controlaba, pero sin generar peligro real
El partido comenzó con el City dominando casi todas las acciones. Se movían con calma y avanzaban hacia el campo rival, pero la posesión no se traducía en ocasiones claras. A eso hay que sumarle que Erling Haaland no empezó en el once titular, así como las magníficas intervenciones del arquero Mark Flekken, que atajaba todo y no cedía ante la presión del conjunto local. Incluso fue reconocido como el MVP del encuentro.
Omar Marmoush y Savinho lo intentaron desde distintos sectores, aunque sin éxito. Por su parte, el Leverkusen mantenía orden defensivo y tenía una lectura correcta de las jugadas. A pesar de tener el control, al City le hizo falta concretar en ese último pase y cada ataque terminaba sin ser fructífero.
Golazo de Grimaldo para abrir el marcador
Los alemanes tuvieron su recompensa al minuto 24. Tras un balón rechazado en la frontal, Alejandro Grimaldo llegó desde atrás y conectó un disparo que se metió pegado al poste derecho, imposible para Stefan Ortega, y así se rompía el cero.
El City intentaba responder con mayor ritmo, pero seguía sin encontrar claridad. En la recta final del primer tiempo, Flekken volvió a aparecer con dos intervenciones clave ante Rico Lewis y Tijjani Reijnders. Así, el equipo de Kasper Hjulmand se fue al descanso ganando por la mínima.
Schick lo sentenció con el segundo tanto
Comenzó la segunda parte y el City buscaba igualar el marcador. Aunque seguían con posesión, no lograban hacer daño y minutos después llegó el segundo gol para el Leverkusen. Al 53’, Ibrahim Maza mandó un buen centro al área y Patrik Schick saltó superando a Nathan Aké para mandar un cabezazo ajustado a las redes.
Los Cityzens seguían sin generar ocasiones claras. Haaland tuvo dos oportunidades, Jérémy Doku insistió en el uno contra uno y Rayan Cherki buscó cambiar el ritmo, pero el conjunto alemán se plantó con seguridad y se manejó con inteligencia. Los minutos finales transcurrieron sin un ataque verdaderamente peligroso de los locales.
Así se terminó el encuentro con un 0-2 histórico en el Etihad, una noche grande para el Leverkusen y un resultado que genera dudas para el Manchester City.



