En un partido lleno de intensidad y polémica, el Liverpool venció 1-0 al Real Madrid en Anfield, gracias a un tanto del argentino Alexis Mac Allister, quien fue el encargado de romper la resistencia del portero Thibaut Courtois, protagonista durante gran parte del encuentro.
El duelo, correspondiente a la jornada 4 de la fase de liga de la Champions League, ofreció un espectáculo de alto nivel en el que los locales dominaron el ritmo del juego y mantuvieron la presión constante sobre la defensa española.
El gol de Mac Allister que rompió el muro de Courtois
El tanto llegó al minuto 61, cuando Dominik Szoboszlai envió un centro preciso desde la banda derecha y Mac Allister apareció en el área chica para empujar el balón a la red, venciendo a un Courtois que había sido hasta ese momento la figura del encuentro.
La acción fue revisada por el VAR, que confirmó que no existía fuera de lugar ni infracción previa. Con ello, el árbitro István Kovács validó la anotación que rompió el empate sin goles y encendió la euforia de los aficionados en Anfield.
Antes de ese momento, el portero belga del Real Madrid había sostenido a su equipo con una actuación sobresaliente, realizando tres atajadas consecutivas que evitaron la caída de su arco durante los primeros minutos del segundo tiempo. Courtois desvió un cabezazo de Virgil van Dijk, rechazó un remate de Ekitiké y contuvo un disparo de Szoboszlai desde media distancia, consolidándose como figura, hasta que el gol de Mac Allister rompió su pared.
Al Real Madrid ‘le perdonaron’ un penal
El encuentro también tuvo su dosis de polémica en el minuto 39, cuando una mano de Aurélien Tchouaméni dentro del área del Real Madrid fue revisada exhaustivamente por el VAR.
El silbante Kovács había señalado inicialmente una falta, pero tras observar las repeticiones determinó que no existía infracción, ya que el brazo del mediocampista francés estaba pegado al cuerpo al momento del impacto del balón.
La jugada provocó protestas del banquillo local, que consideraba que el contacto había sido dentro del área; sin embargo, el VAR, encabezado por Bastian Dankert (Alemania) y Fedayi San (Suiza), coincidió con la apreciación de que no reunía los criterios para sancionar penal.
Durante la primera mitad, ambos equipos mantuvieron la posesión equilibrada, aunque fue el Liverpool quien mostró mayor insistencia en ataque, impulsado por el ritmo de Szoboszlai y la energía de Gravenberch.
En el complemento, el equipo de Arne Slot redobló la presión. Mac Allister, pese a haber recibido tarjeta amarilla por una falta sobre Kylian Mbappé al minuto 52, se mantuvo como pieza clave del mediocampo, recuperando balones y llegando desde atrás para definir la jugada que terminó en el único gol del partido; por su parte, Jude Bellingham también fue amonestado después de una entrada sobre Gravenberch.
El resultado deja al Liverpool con 9 puntos, igualado con el Real Madrid, aunque el conjunto español mantiene ventaja por diferencia de goles. El tanto del mediocampista argentino podría resultar determinante en la lucha por los primeros lugares del grupo.
Para la jornada 5, el Liverpool recibirá al PSV Eindhoven; mientras, el Real Madrid viajará a Grecia para medirse con Olympiacos el próximo 26 de noviembre.
El cuerpo arbitral del encuentro fue completamente rumano, encabezado por István Kovács, con Mihai Marica y Ferencz Tunyogi como asistentes, y Marcel Birsan como cuarto árbitro.



