Thomas Müller esperaba una llamada o guiño de Hansi Flick para ir al Barcelona, pero este nunca llegó.
Müller abandonó al Bayern Múnich tras 17 años en el club, etapa en al que coincidió con Flick para ganar siete títulos, incluida una Champions League en 2020.
Thomas Müller reconoció recientemente que estuvo dispuesto a jugar en el FC Barcelona y que su llegada al club catalán habría sido una posibilidad real si Hansi Flick, su exentrenador en el Bayern Múnich y actual técnico blaugrana, se hubiese puesto en contacto con él.
“Podría haberme imaginado un futuro en el Barcelona. Si Hansi Flick, que me conoce muy bien, me hubiera llamado y el proyecto me hubiera convencido, habría sido una opción. Es un club de alto nivel en el que sabes perfectamente lo que se espera de ti”, explicó el futbolista.
La etapa más exitosa bajo el mando de Flick
Müller y Flick coincidieron durante dos temporadas en el Bayern. En la primera, el equipo vivió una de sus mejores campañas, conquistando el triplete y ganando todos los partidos de la Champions League. Aquella versión del conjunto bávaro fue considerada uno de los equipos más dominantes de la era moderna.
Tras su salida del Allianz Arena en 2021, Flick asumió la dirección técnica de la selección alemana, aunque su etapa fue mucho menos productiva y terminó con un porcentaje de victorias por debajo del 48%.
La decisión de marcharse a la MLS
Luego de cerrar la temporada 2024-25, Müller puso fin a su carrera en el Bayern tras 756 partidos disputados y 250 goles anotados, cifras que lo consolidan como uno de los grandes símbolos del club. Su salida estuvo motivada por la irrupción de Jamal Musiala en el once titular y por la etapa final de su carrera deportiva.
El mediapunta fichó por Vancouver Whitecaps de la MLS, un movimiento que él mismo describió como “natural” por el atractivo deportivo y el plan institucional del club canadiense, con el que ya compite por los primeros puestos de la Conferencia Oeste.
Rendimiento inmediato en Canadá
La adaptación de Müller al futbol norteamericano ha sido rápida y exitosa. Con Vancouver ya ganó el Campeonato Canadiense y fue determinante en la final al marcar y asistir. Acumula ocho goles en ocho encuentros y mantiene un promedio de una contribución de gol cada 68 minutos. Además, alcanzó los 300 goles en su carrera y se convirtió en el futbolista alemán con más títulos oficiales (35), superando a Toni Kroos.