Una de las historias más peculiares del futbol juvenil brasileño ocurre en las divisiones inferiores del Ceará Sporting Club, donde tres adolescentes comparten camiseta y nombres idénticos a los de tres leyendas del Barcelona.
Se trata de Lionel Messi Maier dos Santos, Andrey Iniesta y Neymar Cunha Freitas, jóvenes de 13 y 14 años que militan en la cantera del conjunto del norte de Brasil. La coincidencia despertó la atención de los medios locales, entre ellos Globo Esporte, que reveló esta curiosa anécdota que combina admiración, casualidad y una gran dosis de pasión familiar.
Aunque sus nombres evocan recuerdos de la gloriosa era azulgrana, sus trayectorias apenas comienzan. En sus respectivas categorías del Ceará, cada uno busca forjar su propio camino sin depender del peso simbólico que cargan sus apellidos.
Messi, Neymar e Iniesta: un tridente inesperado en la cantera del Ceará
La singularidad del caso reside en que estos tres chicos no solo coinciden en edad y formación, también en su deseo de dejar huella en el futbol. En los entrenamientos, sus compañeros y técnicos no tardaron en notar la coincidencia.
“Cuando llegaron, empezamos a bromear, a reírnos, pero no es el nombre lo que los llevará lejos, sino el trabajo diario”, comentó su entrenador, según declaraciones recogidas por el diario Marca.
Las posiciones dentro del campo no replican necesariamente las de sus célebres tocayos. Andrey Iniesta es el único que juega como mediocampista, igual que su homónimo español; mientras, Lionel Messi Maier dos Santos también ocupa un rol ofensivo, aunque más adaptado a las necesidades del equipo. En cambio, Neymar Cunha Freitas rompe la lógica: se desempeña como defensor, una elección que provoca sonrisas entre sus compañeros y entrenadores.
Cada uno de estos nombres tiene un trasfondo familiar lleno de cariño y respeto por el balompié.
El caso de Neymar Cunha Freitas (14 años) tiene un origen curioso. Su padre reveló que, en un principio, pensó en nombrarlo 'Loco Abreu’, en honor al uruguayo Sebastián Abreu, ídolo del Botafogo y ahora director técnico de Xolos de Tijuana, pero su familia consideró la idea demasiado excéntrica.
“Yo iba a ponerle el nombre de Loco Abreu, pero la familia no me dejó, lo vieron una locura”; poco después, tras ver a un joven Neymar deslumbrar en un partido con Santos, decidió honrarlo con su nombre.
Por su parte, Andrey Iniesta (13 años) también debe su nombre a la inspiración de su padre. Su plan original era bautizarlo 'Andrés Iniesta’, idéntico al ídolo español, pero una coincidencia familiar cambió el rumbo. “Para evitar confusiones en casa con mi propio nombre, decidimos adaptarlo a Andrey”, relató su progenitor.
La historia más emotiva es la de Lionel Messi Maier dos Santos (13 años). Su madre, futbolista amateur, fue quien eligió el nombre al enterarse de su embarazo: “me enteré de que estaba embarazada de tres meses mientras jugaba al futbol. En cuanto lo supe, me vino a la cabeza: Lionel Messi; y así lo pusimos”, recordó.
Messi, Neymar e Iniesta: convivencia marcada por la amistad y el futbol
A pesar de las bromas y la sorpresa inicial, los tres jóvenes se toman la coincidencia con naturalidad. Lejos de presiones o comparaciones, disfrutan la experiencia de compartir vestuario y crecer juntos en un entorno que fomenta la unión y el compañerismo.
El propio Neymar Cunha Freitas lo resumió con sencillez: “jamás pensé que conocería a otro Messi que no fuera Lionel Messi. Y nunca imaginé conocer a un Iniesta que no fuera el del Barcelona”.
Sin embargo, también destacó el espíritu de camaradería que los une: “aquí, en el Ceará, no somos solo un equipo, somos una familia”.
El trío se ganó el respeto de sus entrenadores por su dedicación, humildad y compromiso con el aprendizaje. Aunque comparten nombres ilustres, su desarrollo está enfocado en el esfuerzo diario y en la búsqueda de una identidad propia dentro del deporte.
Más allá de la anécdota, la historia de estos tres jóvenes simbolizó la influencia global del futbol europeo y el impacto que tuvo aquella generación dorada del Barcelona en miles de aficionados.
En Brasil, donde el talento juvenil florece constantemente, casos como este recuerdan que la pasión por el balón trasciende generaciones y fronteras. En el Ceará, estos tres chicos continúan entrenando con ilusión, soñando con algún día llegar a los grandes escenarios, aunque sea por méritos propios y no solo por los nombres que portan.
Mientras tanto, el nuevo Messi, el nuevo Neymar y el nuevo Iniesta escriben sus primeras páginas en una historia que ya cautivó al público; eso sí, no descartemos aun que pueda surgir un Luis Suárez y se forme en el Ceará.
