La propuesta para reducir la jornada laboral en México de 48 a 40 horas semanales representa un avance significativo en materia de derechos laborales; sin embargo, su implementación será gradual, comenzando en 2026 con una reducción mínima de 20 minutos por día, como parte de un plan que se extenderá hasta el año 2030.
Esta reforma, impulsada por la Secretaría del Trabajo y Previsión Social (STPS), busca equilibrar los beneficios para los trabajadores con la capacidad operativa de las empresas, especialmente las pequeñas y medianas.
¿Por qué una reducción progresiva?
El titular de la STPS, Marath Bolaños López, señaló que la reforma debe aplicarse de forma escalonada para evitar impactos negativos en la economía y en la productividad empresarial. Entre los argumentos principales destacan:
- Diálogo y consenso: La reforma requiere la participación activa de sindicatos, empresas y autoridades para garantizar una transición ordenada
- Evitar afectaciones abruptas: Una reducción inmediata podría generar desequilibrios en sectores sensibles como manufactura, comercio y servicios
- Beneficios comprobados: Estudios de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) indican que jornadas más cortas mejoran la productividad, reducen la fatiga, disminuyen errores y accidentes, y favorecen el equilibrio entre vida personal y laboral
Cronograma de reducción de jornada laboral (tentativo)
La propuesta contempla una disminución paulatina de horas laborales por semana, distribuidas de la siguiente manera:
Este esquema permitiría a las empresas adaptarse gradualmente, ajustando sus procesos internos sin comprometer su competitividad.
¿Por qué solo 20 minutos menos por día en 2026?
La jornada laboral actual en México es de 48 horas semanales, distribuidas en 6 días de trabajo con uno de descanso. En 2026, la reducción será de 2 horas semanales, lo que equivaldría a 20 minutos menos por día laboral.
Esto significa que, en lugar de trabajar 8 horas diarias, los empleados laborarán 7 horas con 40 minutos. Aunque el cambio puede parecer mínimo, representaría el primer paso hacia una transformación estructural en el modelo laboral mexicano.
Propuestas de apoyo para empresas
Para facilitar la transición, se plantearon diversas medidas de apoyo:
- Estímulos fiscales: El gobernador de Nuevo León, Samuel García, propuso incentivos para empresas que adopten anticipadamente la jornada de 40 horas
- Subsidios para PyMEs: La Confederación de Cámaras Industriales (Concamin) sugirió revisar el esquema de horas extras y ofrecer subsidios a pequeñas y medianas empresas
- Flexibilidad operativa: Se busca que sectores con alta demanda laboral puedan ajustar sus horarios sin afectar la productividad
Impacto y beneficios esperados por la reducción de la Jornada Laboral
La reducción de la jornada laboral tiene el potencial de generar múltiples beneficios:
- Mejora en la calidad de vida: Más tiempo para descanso, estudio, convivencia familiar y actividades personales
- Aumento de productividad: Menor desgaste físico y mental, lo que se traduce en mayor eficiencia
- Reducción de ausentismo y conflictos laborales: Jornadas más cortas pueden mejorar el ambiente laboral y la retención de talento
- Adaptación empresarial: La gradualidad permite a las empresas reorganizar sus operaciones sin afectar sus ingresos
La reforma hacia una jornada laboral de 40 horas semanales en México es un paso histórico que busca armonizar los derechos con la competitividad económica.
Aunque en 2026 el cambio sería un cálculo de 20 minutos por día, marcará el inicio de una transformación que beneficiará a millones de trabajadores en los próximos años.