Cuando de controversias arbitrales se trata en LaLiga, siempre están los nombres del Real Madrid y Barcelona, que históricamente se han acusado de “favores” de los silbantes. Ahora, la polémica radica en que el presidente del Comité Técnico de Árbitros (CTA) de España estuvo en el palco del Barça viendo el partido de este domingo ante Rayo Vallecano.
Fran Soto, nombrado líder de los colegiados en julio, apareció acompañado de Joan Laporta en el palco del estadio de Vallecas para ver el partido entre Rayo Vallecano y Barcelona y se sentó junto a la directiva catalana, en donde también estuvo Rafa Yuste, vicepresidente de la entidad.
Escándalo en Rayo vs Barcelona porque el VAR no funcionó
Parecería algo “inocente” que el presidente de los árbitros y la directiva del Barcelona coincidieron en un palco, pero el escándalo es exponencial por el hecho de que el VAR no funcionó en el partido y no se pudo revisar un polémico penal concedido al Barça, convertido por Lamine Yamal.
Recién llegado al cargo, este es el primer partido del que se tiene constancia que Fran Soto ve en directo desde su nombramiento y lo hizo sentado con el Barcelona, que terminó empatando 1-1 con el Rayo.
Curiosamente, también hubo polémica arbitral en el juego del Real Madrid vs Mallorca por tres goles anulados a los Merengues, uno por una mano accidental pegada al pecho de Arda Güler y otro por un presunto fuera de juego de Kylian Mbappé, del que jamás se mostró la toma del momento del toque de la pelota previo para determinar su posición.
Los árbitros y el Barcelona
El Caso Negreira es una investigación por presunta corrupción deportiva que involucra al Barcelona y a José María Enríquez Negreira, exvicepresidente del Comité Técnico de Árbitros de la Real Federación Española de Fútbol entre 1994 y 2018.
La Fiscalía de Barcelona y la Agencia Tributaria investigaron pagos por un total de aproximadamente 8,4 millones de euros realizados por el club a empresas vinculadas a Negreira entre 2001 y 2018, durante las presidencias de Joan Gaspart, Joan Laporta, Sandro Rosell y Josep Maria Bartomeu.
Según el Barcelona, estos pagos correspondían a servicios de asesoramiento técnico y arbitral, pero la investigación sospecha que podrían haber tenido como objetivo influir en decisiones arbitrales, aunque no se ha acreditado que afectaran directamente los resultados de los partidos.
