El arribo de Cadillac a la Fórmula 1 en 2026 prometía ser un respiro para los pilotos jóvenes que buscan un lugar en la parrilla más competitiva del automovilismo; sin embargo, la confirmación de Sergio ‘Checo’ Pérez y Valtteri Bottas como la alineación titular del nuevo proyecto estadounidense generó conversación en el paddock.
Uno de los más críticos fue Liam Lawson, quien no dudó en mostrar su descontento con la decisión del equipo. Para el neozelandés, de apenas 23 años, la Fórmula 1 debería apostar por el relevo generacional en lugar de seguir confiando en corredores con más de una década de experiencia.
“Para mí, que soy un joven piloto, pienso que hay muchos jóvenes que merecen una oportunidad en Fórmula 1. Están haciendo un gran trabajo en Fórmula 2, pero todavía no tienen una oportunidad. Se puede ver en los novatos que vienen ahora y no lo digo por mí, es por otros chicos que han hecho un extraordinario trabajo en el desarrollo de simuladores. Entiendo que la experiencia puede hacer la diferencia, pero hablo por la gente de mi edad”, expresó Lawson durante la previa del Gran Premio de los Países Bajos.
Liam Lawson tuvo su novatada en F1: apenas dos carreras con Red Bull
La voz de Lawson no es ajena a la polémica. El neozelandés fue elegido a inicios de temporada por Red Bull para reemplazar a Checo Pérez en las dos primeras carreras, pero su estancia fue fugaz y terminó degradado de nuevo a Racing Bulls, donde Yuki Tsunoda tomó su lugar.
Este episodio representó un golpe duro a sus aspiraciones de consolidarse en la máxima categoría, pese a que desde su debut en 2023 había mostrado destellos de talento. La frustración de Lawson radica en que mientras a él le retiraron la confianza, tras solo un par de competencias, la puerta de Cadillac se abrió para dos pilotos que ya tienen más de 30 años de edad.
Checo Pérez y Bottas, veteranos con futuro en Cadillac
El contraste es evidente. Checo Pérez, que cumplirá 36 años en enero de 2026, y Valtteri Bottas, quien celebró su cumpleaños número 36 este 28 de agosto, fueron elegidos como los pilotos que encabezarán el ambicioso proyecto de Cadillac en la Fórmula 1.
Ambos cuentan con una amplia trayectoria: Pérez suma múltiples podios y victorias con Red Bull; mientras, Bottas fue subcampeón (al igual que Checo) con Mercedes y es reconocido por su regularidad. Para la nueva escudería, la experiencia parece ser una garantía más valiosa que el potencial a futuro de un novato.
Lawson y un historial de tensiones con Checo Pérez
La postura crítica de Lawson hacia esta decisión se sumó a un historial de episodios polémicos en los que se vinculó con el piloto mexicano. Durante el Gran Premio de México 2024, Lawson fue captado mostrando el dedo medio a Pérez en una acción que generó amplia controversia.
Posteriormente, cuando se rumoraba que Red Bull podría prescindir del tapatío, Lawson se candidateó abiertamente para ocupar ese asiento, asegurando que podría hacerlo mejor; sin embargo, su falta de continuidad y resultados lo dejaron fuera de esa posibilidad.
Las palabras de Lawson reavivan un debate latente en la Fórmula 1: ¿debe la categoría abrir más espacios a jóvenes talentos o priorizar la experiencia?
Mientras que pilotos como Fernando Alonso y Lewis Hamilton defienden que los equipos eligen por méritos y no por edad, voces como la del neozelandés subrayan que el sistema actual limita la llegada de nuevos corredores.
En un campeonato con solo 22 asientos disponibles, cada decisión de alineación genera repercusiones en las aspiraciones de múltiples pilotos. Cadillac, lejos de convertirse en un trampolín para promesas emergentes como Felipe Drugovich, optó por la seguridad que ofrecen dos veteranos consolidados y la retroalimentación de manos de élite, como las del mexicano y el finlandés.