El exboxeador Julio César Chávez Jr., hijo de la máxima figura del boxeo mexicano, fue ingresado por agentes de la Fiscalía General de la República (FGR) al Centro Federal de Readaptación Social No. 11 (CEFERESO) en Hermosillo, Sonora, uno de los penales de máxima seguridad del país.
Su llegada a México se produjo tras ser arrestado en Los Ángeles por el Departamento de Seguridad Nacional (DHS) y el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) de Estados Unidos. El exdeportista fue entregado a las autoridades nacionales debido a que en su contra pesaba una orden de aprehensión emitida en enero de 2023, vinculada a un expediente judicial abierto desde 2019.

Las acusaciones de la FGR contra Chávez Jr.: crimen organizado y tráfico de armas
De acuerdo con detalles oficiales, Julio César Chávez Jr. enfrenta cargos por delincuencia organizada y tráfico de armas, delitos asociados a sus presuntos vínculos con el Cártel de Sinaloa.
Investigaciones de la FGR, basadas en intervenciones telefónicas realizadas entre 2021 y 2022, lo señalan como un operador subordinado a Néstor Ernesto Pérez Salas, alias “El Nini”, jefe de seguridad del grupo criminal. Los informes sugieren que el exboxeador habría participado en actos de violencia por encargo del cártel.
Los antecedentes de Chávez Jr. en Estados Unidos
El DHS informó que Chávez Jr. ingresó a Estados Unidos el 23 de agosto de 2023 con una visa de turista, la cual venció en febrero de 2024; después, el exboxeador reingresó a suelo estadounidense el 4 de enero de 2025, recibiendo libertad condicional en el puerto de entrada de San Ysidro (California).
Posteriormente, bajo nuevas medidas migratorias impulsadas por el expresidente Donald Trump, se determinó que podía ser deportado el 27 de junio de 2025. Su detención definitiva se concretó el 2 de julio en Los Ángeles, al encontrarse en situación migratoria irregular.
El DHS y el USCIS (Servicio de Ciudadanía e Inmigración de EE. UU.) lo catalogaron como “una grave amenaza para la seguridad pública”, al tiempo que confirmaron la existencia de una investigación por su presunta relación con el Cártel de Sinaloa.
Los supuestos vínculos de Chávez Jr. con el entorno del Cártel de Sinaloa
Otro punto clave en las pesquisas es la vida personal de Chávez Jr. Su matrimonio con Frida Muñoz, ciudadana estadounidense y expareja de Édgar Guzmán López (hijo de Joaquín “El Chapo” Guzmán, asesinado en 2008), reforzó las sospechas de las autoridades.
Aunque Frida se alejó del entorno del narcotráfico tras la muerte de Guzmán López, su vínculo previo con la familia del capo llevó a que la solicitud de residencia permanente presentada por Chávez Jr. en abril de 2024 fuese analizada con especial cautela.
En declaraciones pasadas, el exboxeador reconoció que, por esta relación, los hijos de El Chapo eran considerados como tíos de su hijastra, aunque negó rotundamente mantener lazos delictivos con la organización.
¿Qué sigue para Chávez Jr.?
El proceso de Julio César Chávez Jr. en México apenas comienza y se anticipa complejo. Al estar recluido en un penal de máxima seguridad, enfrentará un entorno de fuerte control y restricciones, mientras los jueces valoran la solidez de las pruebas en su contra.




