Los “Reds”, dirigidos por Arne Slot, comenzaron dominando con goles de Hugo Ekitike y Cody Gakpo, pero el Bournemouth reaccionó con un doblete de Antoine Semenyo, igualando el marcador y poniendo en aprietos al campeón defensor. Fue entonces cuando Federico Chiesa, recién ingresado, marcó el 3-2 al minuto 87, y Mohamed Salah sentenció el encuentro en tiempo añadido .
Más allá del resultado, el partido estuvo marcado por un profundo homenaje a Diogo Jota, quien falleció en julio en un accidente automovilístico junto a su hermano André Silva. Antes del inicio, se realizó un minuto de silencio acompañado por el himno “You’ll Never Walk Alone”, y los aficionados desplegaron un mosaico con el número 20, dorsal que portaba el atacante.
Tras el encuentro, Arne Slot compartió una declaración que conmovió al mundo del futbol.
Arne Slot extrañó a Diogo Jota
“Cuando íbamos 2-2, ustedes saben a qué jugador estaría mirando… Me hubiera encantado poner a Diogo Jota, pero ahora por razones terribles no pude”.
El técnico neerlandés reconoció que fue “la noche más emocionante” que ha vivido en Anfield, no solo por el triunfo, sino por la forma en que el equipo y la afición mantuvieron vivo el recuerdo de Jota. Incluso Ekitike, autor del primer gol, celebró formando el número 20 con los dedos en honor al portugués.
Liverpool ha comenzado su defensa del título con fuerza, pero también con el corazón en duelo. La temporada promete ser intensa, no solo en lo deportivo, sino también en lo emocional, con cada partido convertido en un tributo a uno de los jugadores más queridos por la afición red.