La segunda victoria de Marco Verde como boxeador profesional llegó este fin de semana, aunque no hubo nocaut. El medallista olímpico mexicano nuevamente salió triunfal dentro del encordado, ahora ante el colombiano Cristian Camilo Montero, en una función celebrada en Culiacán, Sinaloa.
El sinaloense, nacido en Mazatlán, fue claro dominador del pleito y logró varios impactos poderosos que pusieron mal al sudamericano, aunque no logró finiquitarlo por la vía rápida como sí lo hizo en su debut recién en mayo pasado frente al regiomontano Míchel Galván Polina, en la función en Arabia Saudita que encabezó Saúl Álvarez.
Las tarjetas de los jueces al cabo de los seis asaltos pactados coincidieron en puntaje de 60-54 en favor de Verde, quien en los pasados Juegos Olímpicos de París logró la medalla de plata.
“Contento de poder pelear en México, de que disfrutaran una gran pelea, en Arabia se fue rápido, aquí nos fuimos a seis rounds, disfrutaron de esta gran pelea y me voy contento”, declaró Marco Verde en el vestidor después de la victoria.
“Es muy diferente, pasa el tercer asalto y me siento... ya no soy amateur, aquí es profesional, pero aun así contento, es un estilo diferente”.
Ahora, como parte del Canelo Team, Marco Alonso cumplió con el objetivo de “recorrer más lona” para ir acumulando la experiencia necesaria en el profesionalismo. En su esquina estuvo su padre Manuel Verde y su entrenador Radamés Hernández, con su manejador, Eddy Reynoso, igualmente pendiente del desempeño.
