Pablo Barrera tuvo que hacer un sacrificio mayor y no contó con el apoyo familiar en el Mundial de Sudáfrica 2010.
Mientras la mayoría de los jugadores del Tri recibieron la compañía de su familia en esa Copa del Mundo, Barrera, de 22 años, la tuvo que pasar relativamente ‘sólo’, pues él y su familia decidieron hacer un sacrificio para ayudarse económicamente durante esas fechas.
Y es que Barrera recordó que le vendió a Rafael Márquez los paquetes de boletos y hospedaje que le había cedido la Federación Mexicana de Futbol para sus familiares. El ahora mediocampista de Querétaro recordó que en ese entonces él y su familia estaban en una situación económica complicada, por lo que no pudieron hacer el viaje por falta de recursos.
“Te dan dos paquetes para tus papás con los partidos que vas a jugar y el hospedaje. En ese momento yo necesitaba lana, en ese momento me regalaron dos paquetes, me dijo: ‘Estos son tuyos, si quieres regalarlos o venderlos, ustedes saben’.
“Me acuerdo de que, en ese momento, Rafa Márquez y (Carlos) Salcido, no recuerdo bien, me dijeron que necesitaban boletos. Yo no los ocupaba, necesitaba dinero para mi familia y se los vendí”, contó Barrera en el Podcaste de Yosgart Gutiérrez (RePortero).
‘TODO ESE TIPO COSAS QUE VIVES EN SELECCIÓN, NO ME LAS IMAGINABA’
Barrera aseguró que el Mundial de Sudáfrica le llevó a conocer una faceta en el futbol que ni siquiera conocía en su paso por Pumas, en casi a todos los niveles.
“Todo ese tipo de cosas que vives en Selección, yo no me las imaginaba. Ahorita no necesitaba eso, claro que me hubiera encantado llevar a mis papás, pero los gastos allá (en México), la verdad no teníamos.
“Es algo muy chingón, sobre todo cuando juegas, lo vives de diferente manera. La presión, la adrenalina, todo lo que llegas al estadio y está lleno. La gente está ahí, aficionados de todos lados, fue impresionante, nos gritaban en la cancha y no escuchábamos”, sentenció.
