El Gran Premio de España dejó ver la parte más competitiva, pero mal enfocada, de Max Verstappen, quien tras su exabrupto durante la carrera no tuvo de otra más que pedir perdón a sus compañeros en el equipo de Red Bull, para intentar dejar atrás la polémica generada por su desobediencia -de inicio- a devolverle el lugar a George Russell, de Mercedes.
Fue Christian Horner, director de Red Bull Racing, quien reveló que el tetracampeón mundial aceptó su error durante una reunión posterior al Gran Premio, una actitud que generó todo tipo de comentarios entre los aficionados de la Fórmula 1, cuestionando -puntualmente- la forma en que Verstappen le aventó el coche intencionalmente a Russell, cuando ya le habían dicho que debía dejarlo pasar.
Verstappen se disculpó en Red Bull por ‘enloquecer’ en España
Por medio de redes sociales, haciendo un balance del complicado presente para la escudería luego de haber ganado en Emilia Romaña, pero con las dos carreras posteriores fuera del podio, Christian Horner mencionó que hubo una disculpa de Verstappen para con todos.
"Max se disculpó en el debrief por su incidente con Russell. El Safety Car también perjudicó la carrera de Yuki Tsunoda, que habría estado muy cerca, si no en los puntos, si nos fijamos en la trayectoria que llevaba", publicó Horner en Instagram, destacando la frustración que todos en el equipo sintieron por el desenlace, sumando apenas un punto en el Campeonato de Constructores.
"España cierra el triplete y nos vamos de Barcelona frustrados por no haber sacado más de la carrera (…) El coche de seguridad salió en el peor momento posible para nuestra estrategia, teníamos la opción de seguir con neumáticos viejos o arriesgar con un juego nuevo de neumáticos duros", agregó.
¿Qué hizo Max Verstappen en el GP de España?
Primero, cuando corría palmo a palmo por el segundo lugar con Lando Norris, un manejo temerario de Liam Lawson sobre Oli Bearman por poco deja como daño colateral al Red Bull del neerlandés, quien explotó por la radio llamando “malditos idiotas” a los que se peleaban por el décimo sitio.
Poco después, un Safety Car por despiste de Kimi Antonelli terminó por dar al traste a los planes de Red Bull. En el reinicio, y ya con cuatro paradas a cuestas, Verstappen fue rebasado por Charles Leclerc y relegado al cuarto puesto, pero lo que hizo perder la compostura a Max fue un incidente con George Russell.
El británico de Mercedes le había ganado la posición por dentro, pero Mad Max le cerró el paso imprudentemente. Su ingeniero de carrera, Giampiero Lambiase, indicó a Verstappen que debía devolver el lugar a Russell, pero no obedeció.
Max no sólo no se quitó, le aventó el coche una vez más a Russell para aferrarse, Varios segundos después, el tetracampeón finalmente dio el paso a George, pero con una evidente afrenta a las reglas de la Fórmula 1, que le costaron una penalización de 10 segundos. De tal forma, Verstappen acabó en 10° sitio y no en el quinto con el que había cruzado la meta.
