Durante los entrenamientos del Gran Premio de Emilia Romaña en Imola 2025, un incidente menor entre Yuki Tsunoda y Franco Colapinto derivó en una situación lamentable fuera del circuito. El piloto japonés de Red Bull expresó su molestia con una seña obscena tras ser bloqueado por Colapinto, quien participaba en la sesión con el equipo Alpine.
Aunque se trató de un evento típico de las prácticas, una minoría de aficionados reaccionó con insultos y ataques racistas hacia Tsunoda a través de redes sociales, lo que motivó una contundente respuesta por parte de Alpine y la Federación Internacional del Automóvil (FIA).
Rechazo total al abuso en redes por parte de Alpine
El equipo Alpine publicó un comunicado en el que condena enérgicamente el acoso online contra cualquier piloto de la parrilla. “No podemos consentir el abuso online e instamos a todos los fans de este deporte que amamos a ser amables y respetuosos”, expresó la escudería.
El mensaje también resaltó que detrás del casco hay una persona, haciendo un llamado a la empatía y al respeto por los deportistas que forman parte de la Fórmula 1. “Estos atletas tienen familia, amigos y seres queridos. Son seres humanos antes que figuras públicas”.
Franco Colapinto también llama al respeto
El joven piloto argentino, Franco Colapinto, mostró una actitud ejemplar tras el incidente. Reconoció públicamente que Tsunoda tenía razón para estar molesto y pidió a sus seguidores actuar con respeto. Sus declaraciones ayudaron a poner fin a la narrativa de confrontación y mostraron madurez ante la adversidad.
Jack Doohan, otro blanco de ataques en redes
El piloto reserva de Alpine, Jack Doohan, también se vio afectado durante el mismo fin de semana. Una cuenta paródica difundió una imagen falsa de su padre, Mick Doohan, aparentemente burlándose del accidente de Colapinto en clasificación. La publicación fue compartida por varios medios y provocó una nueva oleada de insultos hacia Jack y su familia.
“Por favor, dejen de acosar a mi familia. No pensaba que tuviera que llegar a esto”, escribió el piloto de 22 años en su cuenta de Instagram.
“Varias publicaciones argentinas han informado de manera errónea sobre esta imagen fabricada”, añadió el piloto.
Jack Doohan, quien debutó esta temporada en Fórmula 1, sólo disputó seis carreras, sin lograr un solo punto, antes de ser sustituido por Colapinto.
Este caso refuerza la preocupación general en el paddock respecto al impacto negativo de las redes sociales en la vida personal de los pilotos, quienes muchas veces se enfrentan a campañas de odio sin justificación.
La FIA intensifica su campaña contra el odio en redes
El presidente de la FIA, Mohammed Ben Sulayem, se pronunció con claridad: “El automovilismo se basa en la competencia, la pasión y el compromiso. Nunca debe convertirse en abuso u odio”. Además, reiteró su apoyo a Tsunoda y Colapinto, agradeciéndoles por tomar una postura pública ante esta problemática.
Ben Sulayem ha impulsado una campaña activa para combatir los abusos digitales en el automovilismo, con énfasis en educar a los aficionados sobre la importancia del respeto y la civilidad en entornos digitales.
Las acciones de Alpine, la FIA y los propios pilotos demuestran que el respeto es fundamental para preservar la integridad del deporte. Detrás de cada casco, hay un ser humano que merece ser tratado con dignidad.



