Tremendo alboroto el que se generó luego del 2-2 entre Nottingham Forest y Leicester City en la jornada 36 de la Premier League, ya que Evangelos Marinakis, propietario del Forest, irrumpió en el terreno de juego del City Ground para reclamar airadamente al entrenador Nuno Espírito Santo por el resultado, que complica sus aspiraciones de clasificar a la próxima UEFA Champions League.
El partido vio al equipo Forest remontar un gol inicial de Conor Coady (16’) con tantos de Morgan Gibbs-White y Chris Wood, pero un gol tardío de Facundo Buonanotte (81’) rescató un punto para el ya descendido Leicester. Este empate dejó al Nottingham en la séptima posición con 62 puntos, a seis del Arsenal, cuatro del Newcastle, tres del Man. City y a uno del Chelsea y Aston Villa, con solo dos jornadas por disputar.
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VIDEO - Presidente del Nottingham Forest encara a Nuno Espírito Santo
Tras el pitazo final, Marinakis, propietario también del Olympiacos y quien tiene fama de pasional, bajó al césped y encaró a Espírito Santo con gestos de frustración, en un intercambio captado por las cámaras que generó indignación. Gary Neville, exjugador del Manchester United, calificó la escena de “escandalosa” en redes sociales, sugiriendo que Nuno debería considerar su salida.
Espírito Santo, quien ha liderado una campaña histórica para el Forest, explicó que la tensión se debió en parte a una mala comunicación sobre la lesión del delantero Taiwo Awoniyi, quien jugó lesionado hasta los últimos minutos.
“El fútbol son emociones. Es difícil de controlar, sobre todo con tanta expectación hoy”, declaró el técnico a Sky Sports. También defendió a Marinakis: “Es por su pasión que estamos creciendo como club. Nos impulsa a ser mejores”.
Evangelos Marinakis, el dueño ‘peleonero’ de la Premier League
El incidente no es el primero de Marinakis, quien en 2024 fue sancionado con cinco partidos por comportamiento indebido tras un altercado en un túnel y ha protagonizado controversias previas, como increpar a árbitros tras una derrota ante Liverpool. A pesar de las críticas, el Forest aseguró su clasificación a competiciones europeas tras 30 años, aunque aún está por definirse si será Champions, Europa League o Conference League.
La afición y los medios británicos han cuestionado la actitud de Marinakis, considerándola una muestra de ingratitud hacia Espírito Santo, quien transformó al Forest de un equipo que luchaba por no descender a un contendiente europeo. Con un duelo clave ante Chelsea en la última jornada, las tensiones fuera del campo podrían afectar el cierre de una temporada memorable para los Tricky Trees.