Cuatro de las más recientes contrataciones del AC Milan celebraron una cumbre con los aficionados del club en la tienda sobre la prestigiosa Via Dante en el centro de la ciudad italiana.
Santiago Gimenez, Joao Félix, Riccardo Sottil y Warren Bondo arribaron al local y rubricaron algunas camisetas, donde la figura del mexicano desató la algarabía de la hinchada; sobre todo, porque el ariete llegó con asistencia y pase de gol en sus primeros minutos con Il Diavolo.
La Santimanía se desató en las calles italianas con las compras de invierno del equipo, con la ausencia del otro recién llegado Kyle Walker, aunque el inglés ya había tenido su oportunidad de convivencia con los seguidores rossoneros.
Gimenez debutó en la Copa de Italia con una asistencia a Joao Felix, fichado también en el cierre del mercado, en el triunfo 3-1 sobre la Roma en cuartos.
Tres días después llegó el primer gol del mexicano ante el Empoli, en el minuto 76. Con el 7 a la espalda, el antiguo ariete del Feyenoord recibió con espacio, regateó hacia adentro y soltó un potente disparo desde fuera del área para marcar.
Santiago Gimenez, de 23 años, aterrizó en Milan para sustituir a Álvaro Morata, cedido un año al Galatasaray de Turquía, en un traspaso cercano a los 32 millones de dólares.
Con Feyenoord, Gimenez marcó 65 tantos en 105 partidos en dos temporadas y media.
Después del día de los fans con la Santimanía, el equipo tendrá que preparar la serie de playoff en la UEFA Champions League, donde se medirá a su exequipo neerlandés (12 y 18 de febrero), que apenas se despidió de Brian Priske, debido a los “resultados irregulares”, señaló el club.
“Es muy decepcionante para todas las partes haber tenido que tomar esta decisión”, declaró el director general y técnico del Feyenoord, Dennis te Kloese.


