Una situación dramática es la que vive el portero argentino Rodrigo Rey, exjugador de Pachuca y hoy elemento de Independiente de Avellaneda, pues junto a su esposa fue informado que sus hijos, Benicio y Renata, no serían más aceptados en el colegio privado al que actualmente asisten, el Instituto José Manuel de Estrada de City Bell.
Pese a que en la misiva que recibió el guardameta no se especifican las causas por las que no tendrán derecho a ser matriculados en la institución, Rey apunta a una represalia luego de que se quejara de la falta de inclusión para su hijo Benicio, de apenas ocho años de edad.
Y es que el pequeño está diagnosticado con Transtorno del Espectro Autista (TEA), por lo que el propio jugador se ofreció a financiar los cambios necesarios para que su pequeño pudiera desarrollarse en un ambiente adecuado, sin embargo, de acuerdo al propio Rey, todas sus peticiones fueron rechazadas.
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Falta de instalaciones adecuadas para un niño autista, la queja de Rodrigo Rey
De acuerdo al testimonio vertido en redes sociales por quien jugara con los Tuzos en 2019, una fotografía enviada por parte de una terapeuta colmó su paciencia, pues se podía ver al menor recostado en una colchoneta, sin que esta tuviera las especificaciones adecuadas para un niño que necesita diversos episodios de descanso durante el día.
Según Rey, Benicio no cabía en la superficie de la colchoneta, dejando la mitad del cuerpo sobre el piso. El hijo del ex de los Tuzos tiene bajo tono muscular, por lo que requiere recuperar energías ante la fatiga constante a la que se ve sometido.
“Esa imagen es el supuesto ‘espacio de calma’ para nuestro hijo en el colegio. Esta imagen nos parte el alma en mil, esta imagen describe lo que venimos renegando con esta escuela”, apuntó en sus redes sociales. “El equipo de orientación de esta escuela se nos está riendo en la carga. Hoy, una vez más, le faltaron el respeto a nuestro hijo”.
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El colegio mostró su molestia y pidió a Rey que se retractara
Ante las acusaciones, la escuela prefirió redactar una carta en la que pedían a Rodrigo Rey retractarse de sus dichos, obteniendo como respuesta otra misiva con la exigencia de hacer los cambios que garantizaran un espacio de calidad para Benicio y fue entonces cuando la institución decidió desligar a los menores.
Es por ello que emprendieron una inspección de las instalaciones por parte de las autoridades y a pesar de que existe una demanda de parte de los Rey, esta fue desestimada, aunque ya interpusieron la apelación con la esperanza de que sus hijos sean admitidos nuevamente en su colegio.
“Esa bronca de ver que a veces no alcanza con ser buena gente, que defender los derechos de tus hijos le molesta a otras personas y deciden, en represalia sacar a tus hijos de sus espacios, de sus círculos de amigos, sin importar si su estabilidad emocional está en juego, sin importar que son chicos que su entorno los adora, sin importar que uno de ellos es TEA (autista) y que justamente sus amigos lo ayudaron a avanzar este año a pasos agigantados al punto de poder reducir sus terapias de 5 a 3 semanales. Estamos rotos”, publicó Rey.
De momento, seguirán esperando una respuesta positiva para Benicio y Renata.
