Cuentan que un hombre inglés se convirtió en leyenda por “robarle al rico para dárselo al pobre”. Su nombre era Robin Hood y en su honor se creó el que, hoy día, es el club de futbol más ganador de Surinam, un pequeño país en Sudamérica que, irónicamente, pertenece a la Concacaf y no a Conmebol.
Hoy día jugando Octavos de Final de la renovada Concacaf Champions Cup, fue en 1945 que se fundó el Robinhood SV, cuyos orígenes se remontan a la Liga de Futbol Descalzo de esa nación. Gracias a una obra de caridad, en la que les obsequiaron pares de zapatos, pudieron incursionar en el futbol tradicional y, a menos de 10 años de su creación, lograron su primer campeonato nacional.
Robinhood de Surinam, el ‘grande desconocido’ de Concacaf
Con sede en la capital de Surinam, Paramaribo, lugar de nacimiento de algunos futbolistas tan reconocidos como Clarence Seedorf, Edgar Davids y Jimmy Floyd Hasselbaink, Robinhood es un club lleno de historia, con 24 títulos nacionales en sus vitrinas y una reputación de “equipo grande” en la Concacaf en los años 70 y 80.
Amateurs desde su fundación y hasta la fecha, ya que muchos de sus jugadores trabajan para ganarse la vida y encuentran en el futbol un hobby que los ha convertido en ídolos en su país, el Robinhood SV llegó a 5 Finales de Concachampions y a un Triangular por el título en un lapso de 11 años, enfrentándose en cuatro de esas definiciones a clubes mexicanos.
Finales de Concacaf del Robinhood SV contra clubes mexicanos
En 1972, cuando Surinam todavía no existía como país independiente y era reconocido como la Guayana Holandesa, el Robinhood SV jugó su primera Final de la Confederación ante el Olimpia de Honduras, que apenas pudo ganarles 1-0 en el global.
El Águila de El Salvador les quitó la gloria por segunda vez en 1976 y al año siguiente nuevamente se enfrentarían a las Águilas, pero esta vez las del Club América. Con Carlos Reinoso, Alfredo Tena y Hugo Kiese en cancha, y Raúl Cárdenas como técnico, los azulcremas vencieron 2-1 en el global al Robinhood SV en 1977-78, serie que, curiosamente, tuvo sus dos partidos en Paramaribo.
En 1980, bajo formato de triangular jugado en Tegucigalpa, Honduras, y con Hugo Sánchez en sus filas, los Pumas de la UNAM vencieron 3-0 al Robinhood. El título fue para los auriazules del Pedregal, que también se impusieron a los homónimos Pumas de la UNAH (Universidad Autonóma de Honduras).
Dos años después, en 1982, la Final de la Concachampions repitió como protagonistas a los Pumas y Robinhood. Los de Surinam hicieron las veces de “local” en el Estadio Corregidora (0-0) y la Vuelta se celebró en el Olímpico Universitario, en donde los azul y oro ganaron 3-2.
La última vez que Robinhood SV estuvo en una Final del certamen regional fue en 1983. El rival en turno fue el Atlante, el único mexicano que verdaderamente les pasó por encima con un marcador de 6-1 (5-0 en la Vuelta), en el que fue el primer título internacional de los Potros de Hierro.
Los tiempos difíciles llegaron para el denominado “Club de los Pobres”. Por primera vez en su historia se fueron al descenso en el 2014, aunque regresaron un año después a Primera. El dominio avasallador de los 70 y 80 dejó de existir, pero la leyenda del Robinhood SV como el modesto club de Surinam que hizo temblar al América y Pumas en Concacaf seguirá en el recuerdo.