El histórico Brescia del futbol italiano descendió a la Serie C después de 38 años, la tercera categoría del futbol, algo que sus seguidores no toleraron.
Al minuto 95, Anrea Meroni anotó el trágico gol que certificó la sanción deportivo, lo que motivó la invasión de campo por parte de la Nord del Brescia.
La policía tuvo que intervenir para disipar a los rijosos, ya que se desató la violencia y el arrojo de petardos o bengalas, lo que derivó también en la suspensión definitiva del duelo del Brescia, que finalizó 1-1 ante Cosenza (global 2-1).
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Además, hubo un elemento de seguridad herido, dos jugadores a los golpes y lo peor sucedió fuera del inmueble, ya que el auto de Matthieu Huard ardía en llamas, en el marco de los enfrentamientos entre ultras del Brescia y la policía antidisturbios.
La violencia llegó a tal que empleados del club, futbolistas y familias de los jugadores se mantuvieron encerrados en el mítico estadio Mario Rigamonti.
Por si fuera poco, en los alrededores del estadio continuaron los disturbios entre propios aficionados, quienes protagonizaron más peleas y violencia desmedida, que derivó varias horas de incertidumbre para los jugadores, quienes permanecieron dentro para evitar los ataques de los dolidos ultras el Brescia.
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