‘Merecía despedirse, estoy triste por mi decisión’: Julen Lopetegui aceptó ERROR con Raúl Jiménez

Julen Lopetegui va a batallar para conciliar el sueño esta noche.

El estratega español no se tentó el corazón y decidió dejar en la banca al delantero mexicano Raúl Jiménez, en el que muy posiblemente fue su último partido en el Molineux Stadium como jugador del Wolverhampton.

Lopetegui, quien borró al ex del América del equipo debido a su notable baja de juego y pobre condición física, aseguró que quizá cometió un error al no considerar a Jiménez para jugar algunos minutos.

De hecho, apenas la semana pasada el mexicano volvió a una convocatoria del club luego de que el español no lo consideró ni para la banca durante seis partidos al hilo, desatando los rumores sobre una posible mala relación entre ambos.

“Raúl Jiménez se merecía despedirse, tal vez como entrenador yo mismo estoy triste por mi decisión de hoy”, dijo Lopetegui tras el empate 1-1 de este sábado ante Everton.

¡JIMÉNEZ, ENTRE LÁGRIMAS Y AVENTANDO EL PETO!

Un día completo de emociones vivió el delantero mexicano Raúl Jiménez, quien muy probablemente vivió su último partido con el Wolverhampton en el Molineux Stadium, aunque su última exhibición no pudo ser lo que esperaba pues se quedó en el banco de suplentes en el empate 1-1 de la Fecha 37 de la Premier League entre los Wolves y el Everton.}

Jiménez Rodríguez (32 años) se quedó con las ganas de ingresar al compromiso, e incluso reportes indican que al momento en que se confirmó el ingreso del brasileño Matheus Cunha por el español Adama Traoré, el Lobo Mexicano arrojó su casaca de calentamiento al césped y se marchó molesto al vestidor. El duelo se definió por los tantos de Hwang Hee-Chan y Yerry Mina.

Ya finalizado el choque, Raúl Jiménez saltó a la cancha nuevamente para dirigirse a la grada, que una vez más cantó el himno compuesto para el surgido del América, el ‘Sí, Señor’, que con sus goles supo enamorar a sus seguidores durante las cinco temporadas que ha formado parte del elenco británico, consolidándose como uno de los referentes del ataque de los Wolves.

Raúl, acompañado de su familia, caminó hacia la tribuna para escuchar una vez más ese cántico, no pudiendo contener las lágrimas.