Un caos en el desfile propició que Argentina terminara sus festejos en helicóptero

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Se colapsó la fiesta de la Albiceleste en Buenos Aires por la multitud que se hizo presente

Después de 36 años, Argentina volvió a probar las mieles de un Mundial, desde que lo hiciera Diego Armando Maradona y compañía en México 1986.

Ahora, el turno tocó a Lionel Messi, quien junto a toda la Albiceleste brindaron la Copa del Mundo a sus habitantes en las calles de Buenos Aires.

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Con la decisión de decretar día de asueto, la gente se volcó hacia su selección, y más de 5 millones de personas abarrotaron el paso de los campeones del mundo.

La salida de Argentina se dio a las 11:30 AM locales de las instalaciones de la AFA en Ezeiza, y después de cuatro horas y media y sólo 15 kilómetros de recorrido, tuvieron que detener el desfile por el caos que se generó con la multitud, sin siquiera poder llegar al punto más emblemático de Buenos Aires.

“No nos dejan llegar a saludar a toda la gente que estaba en el Obelisco, los mismos organismos de seguridad que nos escoltaban no nos permiten avanzar. Mil disculpas en nombre de todos los jugadores campeones. Una pena”, escribió Claudio Tapia en su cuenta de Twitter.

Ante ello, el Presidente de la AFA recalcó que tuvieron que abortar el desfile aunque escribió un mensaje de agradecimiento a sus seguidores.

“Agradecemos a la provincia de Buenos Aires, encabezada por su ministro de seguridad Sergio Berni, que fue el único que acompañó durante todo el recorrido hasta la entrada a la capital sin registrar ningún incidente, permitiendo a los jugadores abrazarse al pueblo argentino”.

Incidentes durante los festejos de Argentina

Con gente desbordada en las calles, e incluso gente colgada de los puentes, el camión donde viajaba la Albiceleste tuvo que desviarse en varias ocasiones de la ruta.

El colapso generó que la Selección Argentina pusiera punto final después de un desvío en la avenida Larrazábal, en el barrio porteño de Villa Lugano (suroeste de la ciudad), luego de que dos aficionados saltaran al vehículo desde un puente.

Fue entonces que varios helicópteros de la Prefectura Naval recogieron posteriormente a los futbolistas e iniciaron un recorrido aéreo por el centro de la capital, entre las ovaciones de los aficionados que, desde la avenida 9 de Julio y las calles aledañas, llevaban más de diez horas esperando a sus ídolos.