Szymon Marciniak fue designado por la FIFA como el árbitro de la final del Mundial de Qatar, pero hace año y medio su vida era un auténtico calvario, repleto de problemas cardiácos y visitas al médico.
El colegiado polaco tuvo un 2021 plagado de problemas de salud, mismos que ya están en el pasado como se lo explicó a la página de la FIFA en una entrevista.
“Sufrí taquicardias, que es una enfermedad del corazón. Al principio, fue muy difícil y tuve que dejar el arbitraje. Me perdí la Eurocopa, que para un árbitro que está en su mejor edad fue una sensación terrible. Solo mi equipo y yo sabemos lo difícil que fue. Ahora la vida me lo devuelve y, como pueden ver, ni siquiera puedo dejar de sonreír. Es una gran sensación”, expresó el polaco.
Leer más: Razones para apoyar a la Argentina en la final del Mundial si no eres argentino
¿Por qué decidió ser árbitro?
El europeo jugaba para el Wsila Plock, equipo modesto de su ciudad natal y en uno de tantos partidos fue expulsado, así que Marciniak se acercó al colegiado del encuentro para conversar y descubrir su verdadera vocación.
“Hablamos después del partido y me dijo una frase muy importante. Yo le dije: ‘Usted es el peor árbitro que he visto’. Por supuesto, utilicé palabras peores. Pero él me comentó: ‘Si crees que esto es un trabajo fácil, puedes ir e intentarlo. Ya verás’. Y yo pensaba, ¿por qué no? Tengo que demostrar que él es realmente mediocre y que yo voy a ser mejor, así que, inmediatamente fui al curso”, destacó el silbante.
La experiencia del polaco es basta; partidos de UEFA Champions League, Eliminatorias europeos, el Mundial de Rusia 2018, la Copa Árabe de 2021 y mucho más. En Qatar 2022 oficializó el partido entre Francia y Dinamarca de la fase de grupos que terminó en victoria gala y en los octavos de final estuvo presente en el Argentina vs Australia.
La final será el tercer encuentro del árbitro de 41 años y que tiene gafete FIFA desde 2011.
Te puede interesar: ¿Cuántos lugares tendría Concacaf? Así se repartirían los boletos para el Mundial de 2026
